CROQUETAS DE JAMÓN, RECETA FÁCIL PARA SORPRENDER EN CASA

Si hay algo castizo, sencillo, rico y un sinfín de adjetivos, son las croquetas. Son ese plato con infinidad de variantes.

Sin duda alguna, las más conocidas son las de jamón, pero encontramos otras como las de bacalao, pollo, queso azul y demás que también causan sensación.

¿Dónde comerlas en Madrid?

Soy de los que piensan que si las croquetas y la tortilla de un local están buenas, el resto de la carta también lo estará (en el 80% de los casos sucede esto).

Recientemente probé las de Taberna Pedraza situada en la Calle Ibiza y eran una auténtica delicia, elaboradas con jamón ibérico.

Otras que me han encantado por su rebozado con panko son las de la Antigua casa de la paella, llenas de sabor.

Nombrados estos dos restaurantes, nos ponemos manos a la obra para elaborar nuestras propias croquetas de jamón.

INGREDIENTES (Para unas 25 unidades)

100gr de jamón serrano en taquitos.
1/2 cebolla.
150gr de mantequilla.
150gr de harina.
1 l de leche.
Sal, pimienta y nuez moscada.

PREPARACIÓN

Lo primero a destacar es que las croquetas parten de una bechamel elaborada con lo que en cocina se llama roux, que consiste en una masa a partes iguales de harina y mantequilla.

En una cazuela a fuego medio vamos a colocar la mantequilla y la cebolla y la vamos a pochar despacito hasta que quede un pelín transparente.

Seguidamente, añadimos el jamón pero sin cocinarlo mucho, de esta manera no quedará salado. Es el momento de añadir la harina y remover bien, durante unos 3 minutos para que se cocine.

Momento clave, debemos añadir la leche poco a poco. Iréis viendo que se queda la masa demasiado espesa con cada golpe de leche que vayáis añadiendo, pero que no cunda el pánico, cuando terminemos la cantidad de leche que tenemos quedará una bechamel perfecta.

Una vez añadido el litro de leche, tendremos una masa de croquetas rica, pero si queremos que nuestras croquetas estén muy ricas, debemos cocinar la masa unos 20-30 minutos a fuego medio. Hay quien está incluso cerca de la hora. Este paso os ahorrará un par de días de gym, garantizado.

Pasamos la masa a un recipiente plano (para que enfríe antes) y lo llevamos a la nevera unas 12h, lo ideal es tenerlas de un día para otro.

Disponemos el clásico rebozado: harina, huevo y pan rallado. Procedemos a dar forma y freír en abundante aceite (como veis en la foto, todo lo contrario).