RECETA FÁCIL DE TARTA DE MANZANA

Sin duda la receta de hoy es de esas que dejarán un delicado aroma a manzana con canela asada que seguramente a más de uno os transportará a vuestra infancia.

Con muy poquitos ingredientes vamos a ser capaces de realizar esta tarta que debemos intentar que quede lo más «rústica» posible, porque cuanto más intentemos dejarla preciosa, peor nos va a salir.

No cabe duda que hay cientos de recetas de tartas de manzana y a cada cual mejor, por ello te dejo aquí una estupenda lista con algunas recetas de tartas de manzana de lo más resultonas!

INGREDIENTES

• 3 manzanas grandes (no importa la variedad).
• 4 huevos (M).
• 200gr de harina.
• 200gr de azúcar.
• 10gr de levadura en polvo.
• 1 cucharada sopera de mantequilla.
• 5 nueces.
• Un puñado de pasas.
• Canela en polvo.

PREPARACIÓN

Lo primero que vamos a hacer es pelar una de las manzanas, descorazonarla por muy fuerte que suene y la vamos a trocear. En una sartén echamos la cucharada de mantequilla, las pasas, la manzana troceada y media cucharada de canela en polvo  y lo salteamos durante 10 minutos. Reservamos

Por otra parte, en un bowl, batimos los huevos con el azúcar y seguidamente añadimos la harina y la levadura. Mezclamos hasta que no quede ningún grumo.

Una vez frío el salteado de la manzana, se lo añadimos a la mezcla anterior y agregamos también las nueces.

Llevamos esta masa a la nevera mientras que pelamos y fileteamos las dos manzanas restantes.

Forramos el molde, de unos 24cm de diámetro y volcamos la masa. Llega el momento artista colocando minuciosamente las lonchas de manzana o podemos optar por repartirlas sin ningún orden, lo dejamos a elección del cocinero…

Hecho esto, repartimos algún trocito de mantequilla sobre las manzanas para que no se quemen, con 7 u 8 trocitos será suficiente.

La llevamos al horno 40 minutos a 180º calor arriba y abajo.

Una vez pasado el tiempo y tras el aroma que tenemos en la cocina es momento de abrir la puerta del portal para que lo huelan también los vecinos…

La tarta recién sacada del horno queda con un tono mate que es poco apetecible, para arreglar esto, podemos optar por pintarla con mermelada de melocotón.

Adquiere un lustre que te empujará a probarla, pero ¡no!, debemos dejar que se enfríe. Como no, es ideal para desayunar o para acompañar un buen café.